-Los glaciares son grandes masas de hielo que se deslizan por acción de la gravedad hasta áreas donde se derriten.Se forman en zonas de nieves perpetuas, en las que el peso de las capas sucesivas hace que la nieve se compacte y se transforme en hielo.Cerca de los polos, en lugares como la Antártida y Groenlandia, estas masas ocupan superficies gigantescas y presentan espesores de varios kilómetros: son los inlandsis o grandes casquetes de hielo.En latitudes templadas, es posible encontrar glaciares en las zonas montañosas (a mayor altitud cuanto más nos acercamos al ecuador). Son los glaciares de valle o alpinos, formados por el circo y la lengua glaciar.Como agentes geológicos, los glaciares presentan las siguientes características:
-Poseen gran capacidad de erosión y transporte debido a su estado sólido y a los grandes espesores que alcanzan. Son capaces de excavar profundos valles y de arrastrar bloques de decenas de metros.
-No redondean ni separan por tamaño los sedimentos que transportan,que se disponen en cordones alargados o morrenas.
EL MODELO GLACIAR.
Los glaciares alpinos dan lugar a un relieve muy característico, con formas de erosión y de depósito.
MODELO PERIGLACIAR.
En las áreas de montaña, donde la temperatura sube y baja de 0 °C, la gelifracción se convierte en un eficaz agente de meteorización. Los fragmentos resultantes se acumulan al pie de las paredes rocosas, de manera que dan lugar a conos o taludes de derrubios llamados canchales o cascajales.
-Poseen gran capacidad de erosión y transporte debido a su estado sólido y a los grandes espesores que alcanzan. Son capaces de excavar profundos valles y de arrastrar bloques de decenas de metros.
-No redondean ni separan por tamaño los sedimentos que transportan,que se disponen en cordones alargados o morrenas.
EL MODELO GLACIAR.
Los glaciares alpinos dan lugar a un relieve muy característico, con formas de erosión y de depósito.
MODELO PERIGLACIAR.
En las áreas de montaña, donde la temperatura sube y baja de 0 °C, la gelifracción se convierte en un eficaz agente de meteorización. Los fragmentos resultantes se acumulan al pie de las paredes rocosas, de manera que dan lugar a conos o taludes de derrubios llamados canchales o cascajales.