EL MAR.
La acción modeladora del agua del mar se centra en la franja litoral, donde sus movimientos interaccionan con el continente. Por este motivo se habla de modelado costero.Formas costeras de erosión
Las rocas que forman las costas pueden ser heterogéneas u homogéneas.
-Cuando las rocas son heterogéneas se origina un paisaje con entrantes y salientes. Las zonas salientes, como los cabos, están constituidas por rocas duras; las zonas con entrantes, como las calas, bahías y ensenadas, están formadas por rocas blandas.
-Las rocas homogéneas presentan la misma resistencia a la erosión y dan lugar a costas rectas.
Las formas costeras de erosión más típicas son los acantilados, paredes más o menos verticales compuestas por rocas resistentes. El oleaje actúa sobre su base creando oquedades que los hacen inestables y facilitan el desprendimiento de grandes fragmentos, proceso que contribuye a su retroceso.
Al pie del acantilado se va desarrollando una superficie de erosión, la plataforma de abrasión o rasa, cubierta por los fragmentos anteriores que se van redondeando. Junto a los acantilados, es frecuente la presencia de arcos e islotes.
La acción modeladora del agua del mar se centra en la franja litoral, donde sus movimientos interaccionan con el continente. Por este motivo se habla de modelado costero.Formas costeras de erosión
Las rocas que forman las costas pueden ser heterogéneas u homogéneas.
-Cuando las rocas son heterogéneas se origina un paisaje con entrantes y salientes. Las zonas salientes, como los cabos, están constituidas por rocas duras; las zonas con entrantes, como las calas, bahías y ensenadas, están formadas por rocas blandas.
-Las rocas homogéneas presentan la misma resistencia a la erosión y dan lugar a costas rectas.
Las formas costeras de erosión más típicas son los acantilados, paredes más o menos verticales compuestas por rocas resistentes. El oleaje actúa sobre su base creando oquedades que los hacen inestables y facilitan el desprendimiento de grandes fragmentos, proceso que contribuye a su retroceso.
Al pie del acantilado se va desarrollando una superficie de erosión, la plataforma de abrasión o rasa, cubierta por los fragmentos anteriores que se van redondeando. Junto a los acantilados, es frecuente la presencia de arcos e islotes.